29 de noviembre de 2011

Trotamundos - 1era Parada: Londres

   La semana pasada fue de verdaderos trotamundos ya que visitamos 4 ciudades dentro de 3 países en 8 días, en un paseo increíble por el viejo continente! Por ello, dedicaré los próximos posts a contarles un poquito de nuestra aventura. 
  La primera parada fue en la ciudad de Londres, la cual visitamos por 3 días completos, y como en muchas otras cosas, la segunda vez es siempre mejor! Tras haber superado los percances del año pasado, incluyendo el robo de nuestra cámara con todas las fotos tomadas durante el viaje, nos dispusimos a hacer un recorrido muy similar al anterior, con el propósito de capturar con el lente de la cámara aquellos momentos que albergábamos únicamente en nuestras memorias. Desde el London Eye y el Big Ben, hasta el Buckingham Palace y Hyde Park, documentamos cada momento que llamó nuestra atención.
   Como parte del recorrido, llegamos al famoso estadio de fútbol "Stamford Bridge", donde se cumplen y derrumban los sueños de miles de apasionados seguidores que defienden con la fuerza de mil leones la reputación de su equipo. Contagiados del mismo amor por el fútbol, disfrutamos de la grandeza de jugadores como Fernando Torres, Didier Drogba, Ashley Cole,  Luis Suarez y Pepe Reina, en un reñido partido entre el Chelsea FC y el Liverpool FC. En esos 90 minutos de lucha, no dejé de soñar con el día en que tenga la dicha de ver a mi propio hermano en semejante despliegue de habilidades. 

   De las canchas del deporte más lindo del mundo, fuimos a la "National Gallery" de Londres para ser partícipes de la exposición "Leonardo da Vinci: pintor en la corte de Milán", donde se exhibe, por período de 3 meses, la mayoría de las obras creadas por el afamado pintor; incluyendo "Salvatore Mundi", una pieza que por varias décadas recorrió ciudades del mundo sin que se conociera su autor y por ende, su valor. 

   Recorriendo sus calles, conociendo a su gente y compartiendo con viejos amigos, fuimos testigos de las mil y una razones que hacen de ésta una ciudad tan interesante. Y, aunque no se escuche tanto español por sus calles (como me gustaría), es inevitable encantarse con las lenguas africanas e indias que circulan por doquier, así como por lo placentero que resulta escuchar el inglés con ese acento tan particular y elegante que caracteriza a los habitantes del Reino Unido. Y, después de muchas experiencias nuevas y facinantes, llegó la hora de despedirse de la ciudad que contagió tanto pero tanto a Rembe, que hasta un ligero "acento británico" le dejó. Hasta el próximo post!

P.S. secreta: "I know it was there"...TAD

8 de noviembre de 2011

Una panameña en el extranjero

Como dice el dicho, "nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde" y, aunque no haya perdido a mi Panamá, estar lejos me provoca un vacío en el corazón que sólo se apacigua con aquellas cosas que me hacen pensar en mi país. Por ello, en este mes de Noviembre en que celebramos a mi patria chiquita, quise reflexionar sobre el sentir de una panameña en el extranjero. 

A lo largo de los años, una de las cosas que más me han dicho es que no parezco panameña; algo que siempre me llena de nostalgia al no ser percibida como una representante apta de mi país. Panamá es y siempre será un crisol de razas y creo que esta es una de las razones que hacen del mío un país tan atractivo para personas de todo el mundo que llegan a vivir allí y pasan como "locales". Con excepción de los "gringos" que se visten con camisas hawaiianas o las clásicas "My name is Panama", medias blancas hasta las rodillas y cangureras - Amigos gringos: Si los panameños no nos vestimos así, por qué lo hacen ustedes?.

Por otro lado, cuando las personas se enteran que soy panameña, lo primero que se les ocurre para romper el hielo es mencionar el Canal; y, aunque sin él no seríamos lo que somos, Panamá no es sólo un canal. Nunca olvidaré que mientras me registraba en mi universidad en Washington, DC, la chica que estaba detrás mío en la fila estaba muy sorprendida y me preguntó cómo había hecho para llegar desde tan lejos hasta los Estados Unidos, si fue por barco o cómo. Es una pena, considerando que ella es del medio oriente y probablemente le tomó 3 veces más tiempo en llegar que a mí. Fue ése el día en que me percaté que las personas sabían muy poco sobre mi país y desde entonces me he dedicado a ser una embajadora de las cosas que ofrecemos los panameños. Y es que, si se trata de comida, deleitamos al que sea con un buen arroz con pollo, unos tamales bien calientitos, una ensalada de papa de toldo, un sao sazonado con ají chombo y un raspao´ cargado en leche condensada. Si el tema es de cultura e historia, tenemos un sinfín de opciones que van desde las fiestas patronales en el interior del país hasta las murallas de la antigua ciudad de Panamá la Vieja y el Casco Antiguo. Por otro lado, si lo que quieres son escenarios espectaculares tenemos opciones de montaña, volcán y playas que dejan sin aliento a cualquiera. Y así, me puedo quedar enumerando miles de cosas por ver, saborear, hacer y disfrutar en Panamá. 

Para concluir, quiero decir que, aunque nos queda mucho por hacer y muchas cosas más por aprender y mejorar, nadie puede negar que los panameños tenemos el espíritu y las ganas para hacerlo. A mis lectores que aún no visitan Panamá: anímense, los tiquetes son relativamente económicos y la experiencia será inolvidable. A todos mis compatriotas Panameños sólo me queda decirles que disfruten del bello país que se nos dió y que sigan haciéndolo grande, ya que cuando estás por fuera, atesorarás los momentos en que entras a una discoteca y escuchas a personas de diferentes nacionalidades coreando "Pedro Navaja", "Pásame la botella" o "El gato volador" a todo pulmón. Y, por último, pero no menos importante, utilizando una línea de esa bella poesía escrita por Ricardo Miró, mi Panamá querida sólo me queda decirte que: "quizás fuiste tan chica para que yo pudiera llevarte toda entera dentro del corazón!"



1 de noviembre de 2011

Halloween bajo la lluvia!

Con motivo del fin de semana de brujas nos fuimos a Salem, Massachusetts para revivir la increíble experiencia de hace 3 años cuando fuimos por primera vez. Disfrazados desde las 12 mediodía de Mario y Luigi, comenzamos la celebración compartiendo un delicioso Dim Sum con amigos y luego, bajo una lluvia torrencial y un frío impensable para esta época del año, emprendimos la aventura hacia Salem muy poco abrigados y aferrados a un sólo paraguas. En Salem, a pesar del aguacero que caía, el espíritu de los locales permanecía intacto; quizás sea porque ése es el único fin de semana del año donde reciben la visita de personas ajenas a esta comunidad - algo parecido al pueblo de Macaracas para tiempo de Reyes (chiste interno con mi familia). Así que, mojados de pie a cabeza, recorrimos las pintorescas calles del pueblo sorprendidos por la creatividad y empeño que todos, desde pequeños hasta ancianos, ponen en la elaboración de sus disfraces. Y es que, en estos tiempos donde nos preocupamos tanto por el qué dirán, me encanta la idea de tener un día al año donde todos dejamos nuestros complejos e inhibiciones a un lado e independientemente de afiliaciones religiosas, costumbres o procedencia, nos damos el lujo de expresarnos y aparentar lo que queremos por unas cuantas horas.

Hasta la próxima!

P.S.: Gracias a Dios, he tenido la dicha de crecer rodeada de mujeres increíbles que cada día enriquecen mi vida. El día de hoy es el cumpleaños de una de ellas: Mi Tía Mayi de Mi Vida, como cariñosamente le digo, y por ello le dedico este post a quien ha sido como una segunda madre para mí y mis hermanos!