Hace unos días me fui a dar un masaje por un tremendo dolor de espalda que me aquejaba. Mientras me relajaba y dejaba que las manos del fisioterapeuta hicieran su magia, me distraje con la conversación que tenía lugar en la cabina de al lado. La terapeuta le comentaba a la paciente que ella era una "Puertorriqueña Honoraria" y que tenía que visitar dicho país unas dos o tres veces al año. Intrigada por este "cargo", que a mi parecer sonaba bastante legítimo, regresé a mi oficina y comencé a investigar en Internet lo que yo tendría que hacer para convertirme en "honoraria" de algún país y tener así la excusa de viajar allí un par de veces al año. Tras unos cinco minutos de búsqueda no encontraba nada concreto así que le pregunté a una de mis colegas y su respuesta se resumió en una carcajada. Y, así, con un ataque de risa, me enfrentó a la triste realidad de que era una simple expresión que algunas personas utilizan para referirse a algún lugar del cual se sienten muy apasionados y no el título oficial que yo buscaba.
Un poco desilusionada tras perder la posibilidad de convertirme en honoraria de algún lugar en esta tierra, me puse a pensar, hipotéticamente, en cuál sería el lugar de mi elección. Tras divagar mentalmente de un lado al otro decidí que quisiera ser "Cinque Terreña Honoraria". Les Cinque Terre, un conjunto de 5 pueblos o tierras (de ahí el nombre Les Cinque Terre) en Liguria, Italia, me cautivaron por completo. Con su comida, paisajes y la luna más hermosa que haya visto, estos mini-pueblos tienen un encanto sin igual. Así que, aunque no exista un título oficial que me "obligue" a viajar a Les Cinque Terre varias veces al año, he hecho una promesa conmigo misma de regresar en varias ocasiones futuras. Y es que con sólo pensar en sus calles, en la tranquilidad de su gente y su mar, y en los mil sabores que las caracterizan me empiezo a preguntar qué hago aquí sentada frente a un computador en vez de agarrar el próximo avión y perderme en sus encantos para siempre!
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Vista de la playa en Monterosso al Mare al amanecer |
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Pintorescos apartamentos en Manarola |
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Vista aérea de Vernazza |
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Pastas con abundancia de mariscos - la especialidad de Les Cinque Terre |
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El centro de Monterosso al Mare por la noche |
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Una abuelita asomada desde su balcón en Monterosso al Mare |
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Reflejo de la hermosa luna desde el puerto de pescadores en Monterosso al Mare |